La oportunidades no son objetivos

Por Nacho Muñoz

Un grupo de pensadores de la segunda mitad del siglo XX, con Guy Debord a la cabeza, emplearon la deriva como recurso para conocer y experimentar la ciudad: en vez de ir a un lugar concreto de la misma, utilizando mapas o hitos ya previstos y conocidos por todos, la deriva consistía en acudir a aquellos lugares de la ciudad movidos exclusivamente por las emociones que van generando esos espacios, a raiz de las conversaciones que se van teniendo, o de los pensamientos y experiencias que se van asociando durante el recorrido.

La deriva podía finalmente concluir en la realización de un mapa, pero no el mapa que relacionamos a la típica guía turística, sino uno más íntimo de la ciudad basado en las propias emociones y experiencias vividas. Lo importante de la deriva no es el lugar concreto al que ir en la ciudad (el objetivo), sino lo que le ocurre a la persona cuando se encuentra en ella recorriéndola (la búsqueda). Y los lugares encontrados durante la búsqueda de experiencias se convierten en los objetivos que se deseaban encontrar.

Las oportunidades, personales y profesionales, no parece que estén en un lugar, como si se tratara de una sección de unos grandes almacenes, al que hay que ir y hacia donde dirigir nuestros pasos. La oportunidad tampoco es un camino conocido que hay que recorrer: no se trata de ir desde un lugar hacia otro previamente fijado, allí justo donde se encuentra esa posible oportunidad adaptada a nuestras necesidades. No, las oportunidades no pueden ser tratadas como objetivos. Quizá sean consecuencias, pero no finalidades en sí mismas.

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Buscar una oportunidad para innovar, para emprender o para transitar de un estado (personal o profesional) a otro radica en trabajar en un territorio de incertidumbre permanente, consiste en deambular en un contexto en el que no se tienen claro los objetivos concretos porque, precisamente, lo que se desea es que aparezca la oportunidad de poder formularlos y articular un proyecto en torno a ellos. Trabajar sin objetivos es, precisamente, a lo que no estamos acostumbrados: sin una meta clara, nos cuesta trabajo saber por dónde hay que empezar e, incluso, puede parecernos que se hacen las cosas sin sentido, provocando la lógica desesperación del que se encuentra perdido.

Cuando se buscan oportunidades no se tienen metas precisas, ni tampoco se define un protocolo de actuación concreto, porque es el hecho mismo de buscar nuestros propios objetivos lo que nos mueve y, también, lo que nos conmueve. Encontrar o no las oportunidades no depende en exclusiva de nuestra voluntad ni de nuestra actividad, por lo que se hace necesario saber disfrutar del proceso mismo de búsqueda y darse cuenta que es la propia búsqueda, y todo lo que a su alrededor suceda, lo único que podemos garantizar que ocurra. Esquivar la desazón que produce la ambigüedad de todo este proceso es condición necesaria para no caer derrotados. Resiliencia.

Publicado en con_gestión de personas.com. Post original aquí.

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El Cuadro de Mando Integral (III): el Mapa Estratégico

Por Francisco Páez

Continuando con la serie de artículos sobre El Cuadro de Mando Integral, voy a abordar uno de los elementos clave a la hora de comprobar la eficacia de nuestro modelo.

El mapa estratégico es una manera de proporcionar una visión macro de la estrategia de una organización, y proporcionan un lenguaje para describir la estrategia, antes de elegir las métricas adecuadas para evaluar su desempeño.

Cuando Kaplan y Norton analizaban las organizaciones que habían implementado con éxito el Cuadro de Mando Integral identificaron dos factores comunes: foco y alineamiento.  En el proceso de desarrollo del CMI las organizaciones tenían que repensar sus prioridades estratégicas y describir sus estrategias. Esto les llevo a plantear un principio más profundo al ya conocido “Lo que no se puede medir, no se puede controlar”:

No se puede medir lo que no se puede describir“. 

De esta forma, los mapas estratégicos, que inicialmente había formado parte del proceso de construcción del CMI pasaron a considerarse un tema principal.

Mapa Estratégico

El Mapa Estratégico nos permite reflejar las relaciones causa-efecto entre los distintos objetivos estratégicos, de forma que podamos identificar claramente su complementariedad, neutralidad y los conflictos que pudieran generar. De esta manera se facilita el entendimiento de todo el sistema y especialmente de la estrategia.

Si seguimos el flujo de las relaciones en el Mapa Estratégico y lo ponemos por escrito, tendremos la descripción completa de la estrategia.

Si nuestro Cuadro de Mando Integral contempla diferentes prioridades estratégicas, tendremos objetivos en cada una de las perspectivas para cada una de las prioridades. En este caso, el Mapa Estratégico es todavía más importante porque nos permite identificar los posibles conflictos entre objetivos de las diferentes prioridades.

Mapa Estratégico Prioridades

La idea básica es comenzar mirando una perspectiva más alta para identificar lo que se necesita, e ir recorriendo la lista hacia abajo para entender qué debe hacerse para lograrlo. El mapa estratégico codifica esta información. Las flechas de efecto van de las perspectivas más bajas a las más altas, pero las flechas de inferencia estratégica (que no se dibuja explícitamente en el mapa estratégico) parten de perspectivas más altas hacia otras más bajas.

En este contexto, alinear los objetivos de estas cuatro perspectivas es la clave de la creación de valor y de una estrategia focalizada e internamente consistente. En síntesis, el mapa estratégico proporciona el marco visual para integrar todos los objetivos de la empresa e identifica las capacidades específicas relacionadas con los activos intangibles de la organización (capital humano, de información y organizacional) para obtener un desempeño excepcional.

Una vez creados, los mapas estratégicos son excelentes herramientas de comunicación, ya que permiten que todos los empleados comprendan la estrategia y la traduzcan en acciones específicas para contribuir al éxito de la empresa.

Para aprender más sobre el Cuadro de Mando Integral, te recomiendo los libros de Robert Kaplan y David Norton, los profesores de Harvard que desarrollaron este modelo y han seguido evolucionándolo.
Publicado en CMI Gestión. Post original aquí.

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Los 4 Pilares de una Estrategia Empresarial Exitosa

http://www.dreamstime.com/-image7299530Una Estrategia Empresarial exitosa se basa en cuatro fundamentos esenciales: Valores, Misión, Visión y Propuesta de Valor para el cliente, todos ellos claramente articulados.

Si miras de cerca el funcionamiento interno de las empresas exitosas y líderes en el mercado,rápidamente llegarás a la conclusión de que todas ellas tienen una Estrategia Empresarial basada en cuatro fundamentos esenciales: Valores, Misión, Visión y Propuesta de Valor para el cliente, todos ellos claramente articulados.

Si bien esto no es novedad, es sorprendente cómo todavía hay organizaciones que no tienen en cuenta este punto al momento de crear su Estrategia Empresarial.

¿Cuáles son los componentes básicos de una Estrategia Empresarial?

1.- Valores Empresariales
Los Valores empresariales representan las creencias básicas compartidas que rigen el comportamiento individual y grupal en cualquier organización. Definen y representan la forma en que hay que hacer las cosas y, en consecuencia, forman la base de los objetivos estratégicos. Cada acción que se lleva a cabo una organización debe estar alineada con sus Valores empresariales básicos establecidos. De hecho, la diferencia entre el éxito y el fracaso de las organizaciones es que las exitosas consideran sus valores todo el tiempo en todo lo que hacen. Es importante observar que los Valores empresariales de la empresa permanecen estables en el tiempo.

Para que los colaboradores de una organización tengan en cuenta los Valores empresariales de cada día, es necesario elaborar una lista corta, enfocada a no más de 5 conceptos. Esa lista, no solo debe identificar los Valores empresariales fundamentales de la organización sino que, además, debe describirlos.

Al definir sus valores empresariales en términos útiles, se facilita a los empleados la toma de decisiones y se los ayuda a que se comporten de manera alineada con los valores empresariales fundamentales de la empresa.


Crear indicadores que midan los valores empresariales

¿Cuál es el sentido de crear como valor empresarial el Respeto, si la organización no tiene un indicador que mida si en ella se toman decisiones y se actúa con respecto?

Además de definir los Valores empresariales que serán base para la Estrategia empresarial de una organización, es importante también contar con indicadores que midan esos Valores empresariales. Las organizaciones exitosas realizan una evaluación del desempeño de los empleados frente a los Valores empresariales fundamentales como parte de los procesos de revisión de rendimiento.

2.- Misión Empresarial
La Misión empresarial de la organización define su razón de ser, es decir para qué existe la misma. Describe de qué se trata el negocio y afirma su valor agregado. Una buena Misión empresarial no solo comunica el propósito de la organización sino que además se alinea con sus Valores empresariales fundamentales. La declaración de la Misión empresarial puede perdurar en el tiempo y no cambiar, a menos que una modificación en la dirección organizacional dé como resultado un cambio en la naturaleza del propósito de la organización.

Una organización que tiene su Misión empresarial alineada con sus Valores empresariales centrales está preparando el escenario para el desarrollo de una Plan de Negocios más coherente.

3.- Visión Empresarial
La Visión empresarial de una organización está construida sobre sus Valores empresariales y es una extensión de su Misión empresarial. Debe incluir un plazo claro (a menudo un horizonte de tres a cinco años) y actuar como una señal en el camino para lograr a la misión empresarial. Es un panorama claro y medible de lo que la empresa quiere lograr hacia el futuro. Como resultado, la Visión empresarial proporciona una forma tangible de evaluar sus avances estratégicos en un período de tiempo específico.

La Visión empresarial es una imagen de la organización y ayuda a comprender por qué y cómo los actores relacionados a ella pueden apoyarla para lograr sus objetivos y metas. El logro de la Visión empresarial implica un progreso en el logro de la Misión empresarial de la organización. Y porque es de tiempo limitado, la declaración de Visión empresarial puede cambiar después de haber finalizado el período que comprende.

La Visión empresarial es o debería ser la meta más importante de una Organización, ya que marca el norte a lograr. Es tan importante el rumbo estratégico que impulsa que amerita que se la valide matemáticamente para asegurar que realmente creará valor.

4. Propuesta de Valor

Una Propuesta de Valor es el conjunto de beneficios que se darán al Cliente. En otras palabras, es la gran promesa por la cual los clientes de una organización la reconocen frente a sus competidores.

La clave del éxito de una propuesta de valor es conocer al cliente objetivo y las propuestas de valor de los competidores, de manera de poder diferenciarse.

Hay tres propuestas de valor clásicas, que varían ligeramente según el sector empresarial. Pero generalmente giran en torno a las mismas tres ideas:

  • Excelencia operacional (ofrecer productos y servicios a un menor precio)
  • Liderazgo de producto o servicio (actualizar continuamente productos y servicios para mantenerse a la vanguardia)
  • Personalización (personalización de productos y servicios para satisfacer las necesidades únicas de cada cliente)

Las organizaciones exitosas identifican claramente su propuesta de Valor y cada colaborador dentro de la organización la conoce. Además, alinean la propuesta de Valor con la Misión empresarial , la Visión empresarial y los Valores empresariales para definir y ejecutar una Estrategia Empresarial exitosa.

El Mapa Estratégico

Con los 4 elementos fundamentales de la Estrategia ya definidos, es el momento de identificar los Objetivos Estratégicos en atención a las siguientes cuestiones:

  • Financiera: ¿Cómo debemos manejarnos financieramente y qué retorno debemos ofrecer a nuestros accionistas?
  • Cliente: ¿Qué debemos hacer por nuestros clientes y qué beneficios debemos darle para premiar su lealtad?
  • Proceso interno: ¿Qué procesos debemos mejorar para dar a nuestros clientes lo que ellos necesitan y esperan de nosotros?
  • Capacidades organizacionales: ¿A qué habilidades, capacidades, gente, cultura, tecnología, herramientas e infraestructura debemos acceder para ejecutar nuestros procesos y ofrecer a nuestros clientes la Proposición de Valor?

Recuerda que hay 4 fundamentos para una Estrategia sólida: Valor empresarial, Misión empresarial, Visión empresarial y propuesta de Valor. Tenerlos en cuenta cuando respondas a estas preguntas te garantizará la creación de una Estrategia empresarial alineada con los Valores empresariales fundamentales de la organización y orientada a cumplir con la propuesta de Valor y el logro de la Misión empresarial y la Visión empresarial. Si lo haces, tendrás una Estrategia Empresarial Exitosa.

¿Qué acciones tomarás en tu negocio y en tu vida, en este sentido?

José Eduardo Villacís Mora nació en Quito-Ecuador pero mexicano por naturalización. Es licenciado en contabilidad y auditoría, maestro en negocios (obtenida en Arizona E.E.U.U); ex Business Planning and Analysis Manager para Novartis Farmacéutica, México; vivió y trabajó en México, Suiza, Costa Rica, Estados Unidos, Perú y Ecuador; es articulista de prensa, publicaciones gremiales y conferencista en diversos foros sobre la República Mexicana, con más de 3,000 horas de capacitación empresarial de primer nivel en México, Latinoamérica y España. Coach Personal certificado por CoachVille Spain, coach de negocios, coach directivo y coach de coaches de ActionCoach México. www.coachpepevillacis.com

Artículo publicado en Ideas para PyMES. Post original aquí.

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Visión, Misión, Objetivos y Estrategias

Por Esteban Oknaian

vision_misionEn el marco de las organizaciones e instituciones publicas y privadas que se han establecido en nuestro país en los últimos 20 años, podemos encontrar un serio compromiso de las mismas con la importancia y el aporte que realiza el Planeamiento Estratégico. Cada vez son más las empresas que dedican un tiempo prudencial al armado y planificación de su estrategia a corto, mediano y largo plazo, como también existen áreas determinadas dentro de la estructura que realizan el trabajo específico de ésta tarea tan compleja pero provechosa a la vez. Teniendo en cuenta las características de nuestro mercado, en dónde interactúan empresas Multinacionales, Capitales nacionales, PyMes, Microemprendimientos, economías regionales y diversos tipos de negocios emergentes, debemos tener en claro cual es el enfoque de cada una de ellas, es decir, que quienes realicen Planeamiento Estratégico deben reconocer cual es su principal Objetivo dentro del mercado en el cuál participan, y es por este motivo que debe privar la búsqueda de lo que se denomina Visón compartida dentro de las organizaciones, que significa, encontrar el consenso de todos los niveles en la estructura piramidal. Distintas definiciones se pueden lanzar cuando se habla de Planeamiento estratégico como, un “modelo de plan a seguir”, “adoptar cursos de acción y asignar recursos”, “integrar principales metas, políticas y cadenas de acción”, ”realizar un plan unificado, amplio e integrado”, así como también definir los pasos a seguir, a saber:

  • DIAGNOSTICAR: Dónde estamos.
  • DEFINIR A DONDE QUEREMOS LLEGAR: Selección de Objetivos o metas a alcanzar.
  • SELECCIONAR EL CÓMO LLEGAR: Identificar los posibles cursos de acción.
  • ASIGNAR LOS RECURSOS EN DEBIDA FORMA

En función de lo planteado hasta el momento debemos reconocer los aspectos básicos que definen a cada empresa y que se refieren al tema propuesto en éste trabajo: VISIÓN, MISIÓN, fijación de OBJETIVOS y ESTRATEGIAS.

En cuanto al concepto de Visión en una organización, siempre debe caracterizarse con una cuestión fundacional, de principios y que además encuadra al resto de los conceptos que vamos a tratar. Entonces se puede hablar de imaginar una situación futura y deseable, que se aspira conseguir en un horizonte de tiempo mas bien lejano, aunque para ello no se tenga claro el camino para lograrlo. El concepto es que la visión o mejor dicho la Visión compartida que mencionamos anteriormente, opere como un factor de motivación para los miembros integrantes de la organización y de ésta manera encontrar el consenso buscado. Generalmente, visión tiene que ver directamente con la razón de existir de la compañía y seguramente estará definido por los dueños, accionistas o referentes que estén encargados de dirigir la misma, además de articular la búsqueda estratégica. Ejemplos prácticos:

  1. La mejor empresa de Seguros de Vida del país en productos de crédito y beneficios para empleados.
  2. La compañía más exitosa del país en generar productos enlatados.
  3. Brindar el mejor servicio especializado en Maternidad y Neonatología entre las clínicas situadas en la Capital Federal.

Algunos autores coinciden entre las definiciones que se esbozan acerca de Visión y Misión, pero entendemos que éste último concepto tiene que ver directamente con la naturaleza del negocio, es decir, la forma en la cuál la compañía intentará cumplir con su Visión. La Misión tiene que ver con las características de las organizaciones, como ser, el mercado en el cuál se desenvuelve, los clientes a los que apunta, qué necesidades de los clientes pretende satisfacer, que clase de productos ofrece, que atributos primordiales contienen sus productos. Algunos ejemplos pueden ser:

  1. CALIDAD TOTAL
  2. DELEGACIÓN DE PODER EN LOS EMPLEADOS
  3. ESFUERZO POR SATISFACER A LOS CLIENTES
  4. CALIDAD DEL PERSONAL
  5. PROTECCIÓN DE LA MARCA
  6. MAXIMIZAR LA PRODUCTIVIDAD Y LA SINERGIA
  7. PERSPECTIVA GLOBAL (VISIÓN PANORÁMICA)

De manera que la Misión actúa como un elemento que sirve de marco para encuadrar y definir las estrategias que trataremos más adelante. Basándonos en el esquema de proceso de planeamiento, debemos entender al diagnóstico FODA (fuerzas y debilidades – mirada hacia adentro – Oportunidades y Amenaza – mirada hacia afuera), como pieza inicial y fundamental del proceso mencionado, así como también el resultado de ese diagnóstico en cuanto a la definición de negocios (actual, futuro y potencial), áreas de resultados clave, áreas  de problemas, etc.

Una vez realizado dicho análisis podemos comenzar a pensar cual o cuales van a ser nuestros Objetivos y sus consecuentes Estrategias. Comenzando por los objetivos, primero necesitamos entender el concepto en todos sus aspectos, es decir, pueden ser específicos y no específicos. En el primer caso, deben ser mensurados, en función de un cálculo predeterminado y definidos y acotados en el tiempo. Algunos autores suelen llamar a éstos objetivos “metas”. Los no específicos, simplemente no cumplen con las condiciones mencionadas y por supuesto la idea es tratar de convertirlos en los primeros. Pero no solo de éstas características se nutren los objetivos, sino que podemos dar una pequeña lista que detallamos a continuación:

  • Deben estar adecuadamente definidos.
  • Necesitan contener una descripción detallada de la situación futura a la que se aspira.
  • Tener una escala de medida, es decir que deben ser mensurados.
  • Definición en el tiempo.
  • Aspectos cualitativos y cuantitativos deben ser incluidos dentro de su definición.
  • En cuanto a su redacción, no deben ser escritos como verbos.

Como ejemplos podemos encontrar, a grandes rasgos, algunos como:

  • Rentabilidad
  •  Satisfacción del cliente
  • Cashflow
  • Producción
  • Marketshare
  • Personal Capacitado
  • Crecimiento
  • Ventas

Por supuesto que los objetivos mencionados no serán tratados como tales si no cumplen con todas las condiciones que describimos anteriormente y es por ello que entendemos que si ésta premisa no se cumple, los objetivos planteados pueden llegar a representar “valores o pautas de conducta”.

Fijar objetivos resulta difícil, cuando los objetivos individuales de las personas conviven con los buscados por la empresa, es así como las responsabilidades funcionales de cada una de las estructuras de la pirámide deben trabajar en el consenso como base fundamental. Conseguir el compromiso de los integrantes de la organización, es encontrar una idea en común, es decir trabajar en grupo, crear un clima de trabajo e implementar la creatividad. Lo expuesto tiene que ver directamente con un concepto que tratamos al inicio de éste trabajo, la visión compartida que busca integrar grupos, participantes de distintos niveles y atrae a éstos a ser parte del objetivo planteado encontrando el compromiso y no la obligación o el acatamiento. Los objetivos tienen que ver con las preguntas de ¿Que ? o el ¿ Cuanto ?

Para poder alcanzar los objetivos se deben plantear las estrategias necesarias, que actúan como medios, caminos y alternativas. Es decir que se plantea el curso de acción elegido en base a una serie de cursos de acción alternativos. Resulta provechoso que las estrategias se planteen sobre cuestiones claves, para ello es muy importante que se hayan realizado correctamente los pasos previos y que estos cursos de acción tengan un impacto significativo respecto del objetivo buscado.

En cuanto a las características podemos decir que las estrategias deben contener los planes de acción a llevarse a cabo, el desarrollo de los procesos necesarios para esa tarea y el detalle de los recursos requeridos y su asignación.

Respecto de los tipos de estrategias encontramos las que se refieren a las de “resultado o salida”, como ser productos, diferenciación de calidad, estrategia competitiva, política de precios, mercado, canales de distribución y canales alternativos, etc. Es decir que éstos están directamente relacionados con el marco que planteamos al definir la Misión y nos sirven como guía para redefinir el concepto. En cambio las estrategias de “entrada” están directamente relacionadas con la obtención y utilización de recursos (RRHH, capital humano, tecnología, capacitación, financiamiento, etc).

Entonces, como cuando se planteaban preguntas en torno a los objetivos tales como ¿ que ? o ¿ cuánto ? cuando mencionamos las estrategias debemos preguntarnos ¿ cómo ?

Una herramienta muy conocida en gestión es la “Cadena de Medios y Fines”  que se utiliza como método para establecer Objetivos. Tiene que ver con el planteo de una serie de preguntas en forma secuencial, a través de cuestiones como ¿ para que ? La respuesta nos va dejando un objetivo de orden superior y es allí donde se van planteando nuevos logros a alcanzar, así como también las preguntas de ¿ como ? y la respuesta que determina los medios para alcanzar los objetivos. Es decir, que distintas preguntas van dando un ordenamiento al desarrollo de objetivos y a la definición de las alternativas posibles, por ende pueden darse distintos caminos para nuevos destinos que han surgido del análisis. Como conclusión podemos mencionar que un Objetivo es único por sí mismo y las Estrategias siempre deber ser alternativas.

Por último, podemos relacionar algunos conceptos importantes en planeamiento estratégico como es el vinculo que existe entre MISIÓN, GRUPOS DE INTERES y ESTRATEGIA.

VMOE

 

 

1) Análisis del impacto de los Grupos de interés

  • Identificar y reconocer los Grupos de interés
  • Establecer sus inquietudes
  • Determinar los más importantes para la organización
  • Identificar los objetivos estratégicos generados

2) Observando los Grupos de Interés Internos encontramos:

Accionistas:

  • Se expresan a través de Asambleas.
  • Su interés general es maximizar las ganancias y asegurar la continuidad de la empresa.
  • Desventajas o problemas:
  1. La aparición de compradores corporativos que adquieren bloques de acciones de empresas que siguen estrategias no consistentes con el interés del accionista.
  2. Cambian Patrimonio por Deudas al tomar prestamos bancarios para comprar las acciones y luego emiten bonos de la empresa para saldar esas deudas.
  3. Uso de los flujos libres de efectivo

De manera que el desarrollo de la estrategia, puede plantearse a través del ámbito Corporativo, de Negocios o Funcional. 

A nivel corporativo se refiere a que negocios debería focalizarse una organización para maximizar las utilidades a largo plazo, planteados desde una visión de Integración vertical, Diversificación, Alianzas Estratégicas, Adquisiciones o fusiones y nuevas operaciones.

A nivel de negocios, se debe seleccionar como se posicionará en el mercado para obtener una estrategia competitiva. También tendrá que revisar la relación que existe entre su estrategia de negocios y la estructura de la industria o sector en el que desarrolla sus actividades (Estrategias de Liderazgo en costos, diferenciación o enfocada en nichos potenciales). A nivel funcional, mejorar la efectividad de las operaciones (Producción, marketing, distribución)  

La inplantación de la estrategia debe encuadrarse en el diseño de la estructura de la organización a través de:

  • Otorgar los recursos necesarios para que la estructura se alinee con la estrategia a desarrollar.
  • Asignar tareas y responsabilidades.
  • Coordinar e integrar todas los niveles desde lo funcional hasta lo jerárquico.

También se deben implementar los mecanismos de control

  • Evaluar desempeños.
  • Controlar las acciones por sectores o departamentos.
  • Alinear intereses particulares de los miembros de la organización en relación a los desarrollados por la empresa.

Finalmente el manejo de los conflictos resulta más que relevante cuando se trate la inplantación de la estrategia. Por ese motivo se deben plantear mecanismos de defensa para contrarrestar los conflictos por las luchas de poder y la formación de coaliciones poco beneficiosas para la organización, así mismo los problemas originados por la resistencia al cambio deben tratarse con mucha seguridad. Como conclusión afirmamos que la planificación estratégica es un proceso complejo, planteado como un todo para la organización, donde los conceptos que desarrollamos a lo largo de éste articulo son parte necesaria de todo el proceso, y seguramente no detenerse en el análisis y revisión de cada uno de ellos llevará a la estrategia a un posible fracaso.

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Planificación Estratégica (III): conceptos clave

Por Francisco Páez

Dentro de la Planificación Estratégica hay una fase denominada Proceso de Reflexión Estratégica en la que hay que definir los principales conceptos que servirán de base para construir el Plan Estratégico:

  • Valores
  • Misión
  • Visión
  • Políticas de empresa
  • Objetivos Corporativos
Valores

Son las creencias que aglutinan y consolidan al grupo directivo y deben ser asumidos por todo el personal, creando un estilo o forma de proceder de la organización acorde a estos principios. La forma de proceder de la empresa es consecuencia de sus valores y es lo que permite crear una cultura de empresa, que es una manera de proceder coherente con sus valores.

Los valores dependen de la calidad y la visión del líder empresarial, así como de la cualificación y saber hacer de sus directivos.

Misión

La Misión expresa la razón de ser de la empresa, su propósito, su finalidad. Para definirla, la empresa debe responder a las siguientes preguntas:

  • ¿A quién queremos satisfacer?
  • ¿Qué necesidades pretendemos cubrirles?
  • ¿Cómo lo vamos a hacer para ser percibidos como su mejor alternativa de suministro?

La Misión debe expresarse en función del servicio que prestamos, más que en función del producto a comercializar y debe:

  • ser diferenciada a la de nuestra competencia
  • abrir puertas al futuro
  • ser motivadora

La Misión no define solamente a qué se dedica una empresa, sino también y más importante, a qué no se dedica

Visión
Mientras la Misión se centra en el presente de la organización, la Visión lo hace en el futuro.
La Visión es la posición de futuro que queremos conseguir y define hacia donde queremos ir.
La Tensión creativa es la fuerza que conduce al cambio para alcanzar la visión, partiendo de nuestra realidad actual.
Políticas de Empresa
Son guías, líneas maestras de actuación o criterios de decisión para la selección de alternativas estratégicas. Se sitúan en un nivel inferior a las estrategias y su función es acotar el campo de la estrategia, canalizarla.
Tienen una vida más larga que las estrategias, pues sólo se cambian ante alteraciones importantes en la organización o en el entorno.Las políticas pueden limitar la capacidad de una empresa para poder decidirse por según qué estrategia.Ejemplos:

  • La reinversión de los beneficios (en lugar de la distribución de dividendos)
  • La promoción interna del personal ante una nueva vacante (en lugar de recurrir a una nueva contratación)
  • La autofinanciación (en lugar del endeudamiento)

 

Objetivos Corporativos

Dentro de nuestra Misión/Visión empresarial, los objetivos son los fines a alcanzar sin perder de vista nuestros valores. Deben ser clarosmediblesalcanzables y planificados en el tiempo, al mismo tiempo que cubren todas las áreas críticas de la empresa.

Los objetivos deben ser una guía para la acción, ayudando a priorizar, centrando el enfoque de la empresa y legitimando la asignación de recursos. Han de ser realistas (alcanzables), pero deben suponer un reto motivante y no una utopía desmoralizadora. Al ser medibles, nos ayudan a controlar y evaluar los resultados.

Ejemplos:

  • Obtener una cuota de mercado en el segmento de alimentos infantiles del 8% para el próximo ejercicio
  • Dentro de 10 años, que el 20% de la facturación se deba a productos no comercializados actualmente
  • Disminuir el absentismo en el trabajo a la mitad para el próximo año

En esta fase es conveniente que el equipo directivo esté asesorado por un profesional externo a la empresa que proporcione una visión fresca y distante de la organización.
Los consultores externos tenemos la ventaja de no estar “contaminados” del día a día de la empresa y de las relaciones con el resto del equipo. También aportamos la experiencia recogida en diversos proyectos y organizaciones de todo tipo.

Artículo publicado en CMIGestión. Aquí puede verse el post original.

Del mismo autor en este blog:

Planificación Estratégica (I): Niveles de gestión estratégica

Planificación Estratégica (II): las etapas.

 

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Planificación Estratégica (I): Niveles de Gestión Estratégica

Por Francisco Páez

 

La Dirección Estratégica es el modelo de dirección que hay que adoptar para sobrevivir y competir con éxito en un entorno cambiante, con nuevas implicaciones para la empresa. Este modelo de dirección necesita definir y planificar la estrategia en diferentes niveles, para atender las distintas necesidades de la organización.

Esta definición de necesidades da lugar a tres niveles estratégicos que, no solo se complementan, sino que cada uno de ellos no tiene razón de ser sin los demás:

    • Estrategia Corporativa
    • Estrategia de Negocio
    • Estrategia Funcional

El principal objetivo de la estrategia es la creación de una ventaja competitiva sostenible en el tiempo, que facilite el éxito de la empresa

Estrategia Corporativa

Está orientada a proporcionar una visión del conjunto de la organización, aportando decisiones sobre el reparto de capacidades y recursos entre las diferentes unidades de negocio.
Ocupa el primer nivel en la escala de decisiones de la organización y está reservada a la Alta Dirección.

Estrategia de Negocio

Se centra en la estrategia de cada unidad de negocio, acorde con la estrategia corporativa, para competir en un determinado sector o mercado.
Recibe los recursos y capacidades asignados por la estrategia corporativa y marca las pautas a seguir.
Los responsables de las unidades de negocio son los encargados de definirla, siguiendo los patrones de la Alta Dirección.

Estrategia Funcional

Se ocupa del empleo detallado de los recursos a nivel operativo en cada una de las áreas funcionales:

  • Administración y Finanzas
  • Comercial y Marketing
  • RRHH
  • Producción y Operaciones

Cada área funcional tiene un responsable, encargado de la estrategia operativa en función de las directrices marcadas a nivel de la unidad de negocio.

Estrategia Corporativa

Para conseguir alcanzar y mantener la ventaja competitiva hay que alinear los objetivos y procesos de cada área funcional con las metas de la organización completa

Para ello, la administración y las diferentes áreas tienen que trabajar en conjunto. Con el objeto de conseguir esta alineación, hay que enfocarse al menos en tres aspectos específicos:

1. Responsabilidad.Todas las áreas tienen que saber cómo van a contribuir a la estrategia de la empresa en su conjunto

2. Recursos. La empresa debe pensar en los recursos materiales, humanos y financieros disponibles y cómo puede utilizarlos

3. Colaboración entre áreas. Se trata de la comunicación abierta para que todos sepan lo que tienen que hacer para las demás áreas. De esta manera, es más probable que todos realicen su parte de manera oportuna

Es muy habitual en las empresas que las diferentes áreas o departamentos estén siempre en pie de guerra, haciéndose la vida imposible unos a otros y tratando de conseguir los favores de la Alta Dirección. Esta es, probablemente, una de las razones de la falta de éxito en la aplicación de su estrategia.

Artículo publicado en CMIGestión. Aquí puede verse el post original.

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Implementación de un Tablero de Comando y Balanced Scorecard en Empresas Tamberas en Argentina (4, y final)

Por Milagros Montell y Joaquín Barsanti

Hoy finalizamos el desarrollo de la implementación del Tablero de Comando en empresas tamberas en la Argentina, con la construcción del Balanced Scorecard  del Tambo. Recordamos que luego de la introducción y el desarrollo del tema del Planeamiento Estratégico que realizáramos en nuestro primer post, hicimos la  introducción del tema Tablero de Comando y Balanced Scorecard  en este otro post  y una Introducción al sector tambero en la Argentina con la inclusión de la Cadena de Valor del mismo, en nuestra tercer entrega

3. Construcción del Balanced Scorecard

Luego de realizar el planeamiento estratégico en la organización, con el que delineamos el marco estratégico, definimos la visión y la misión, los objetivos macro y las estrategias, el siguiente paso para poder operativizar la estrategia es construir el balanced scorecard.

En primer lugar debemos identificar las líneas estratégicas o áreas claves sobre las cuales se trabajarán con las cuatro perspectivas. La línea estratégica básica que tendrá todo establecimiento tambero es maximizar el valor, que se traduce en los objetivos universales de rentabilidad y crecimiento.

Luego debemos definir los objetivos financieros, los objetivos desde la perspectiva de clientes, los objetivos desde la perspectiva de procesos internos y los objetivos desde la perspectiva de infraestructuras.

El paso final consiste en estudiar las relaciones causa – efecto entre estos objetivos estratégicos, para completar el mapa estratégico, diseñando así planes de acción consistentes para toda la organización.

A continuación presentamos el resultado de la construcción de un BSC básico para el tipo de organización bajo estudio, con el detalle de los indicadores abierto por cada una de las perspectivas y las fuentes de información de las cuales se obtendrán los datos para construir estos indicadores.

En los anexos se presentan ejemplos de las planillas a utilizar, diseñadas de acuerdo a los siguientes principios para la fácil introducción de esta herramienta en los procesos operativos de los trabajadores encargados de recolectar los datos:

  • La menor cantidad posible de planillas para no entorpecer las actividades operativas.
  • Planillas de fácil llenado con el objetivo de automatizar el proceso de vuelco de datos.
  • Establecer un responsable por planilla.
  • Solicitar la entrega de la planilla con una frecuencia determinada para que la información sea oportuna.
  • Generar controles por oposición de intereses.

3.1 El BSC de un tambo

BSCTambo

 

3.2 Indicadores

Indicadores Tambo

Anexo  1

anexo 1

Fuente: Ministerio de AGyP – Subsecretaría de Lechería http://64.76.123.202/site/_subsecretaria_de_lecheria/lecheria/07_Estad%C3%ADsticas/index.php

Anexo II – Planillas

Planilla de Producción: Entrega quincenal, con información de datos diaria.

planprod

Planilla de Ración: Entrega quincenal, con información de datos diaria.

planracion

Planilla de Rotación de praderas: Entrega quincenal, con información de datos diaria.

planrot

Planilla de cierre de hacienda de fin de mes, rendición mensual

plancierre

4. Bibliografía

Cómo Profundizar en el Análisis de sus Costos Para Tomar Mejores Decisiones Empresariales.  Héctor Alberto Faga, Mariano Enrique Ramos Mejía. Ed. Granica  2000. 

El Balanced Scorecard: Optimice su estrategia. Javier González Úbeda. Ed. Departamento de Publicaciones del IE Business School, Madrid – España. 2006.

Entrevista empresarios del sector lechero argentino.

Estrategia para el liderazgo competitivo: de la visión a los resultados. Arnoldo C. Hax, Nicolás S. Majluf. Ed. Granica 1997. 

Estrategia y Ventaja competitiva. Porter Michael. Planeta Deusto, 2005.

Gerencia y planeación estratégica. Jean Paul Sallenave. Ed. Norma 2004.

Diez, Gerardo. La problemática del Control en las Organizaciones.

Ministerio de AGyP – Subsecretaría de Lechería 

(“) Trabajo presentado en las XIV Jornadas de reflexión e investigación de temas contables en las cátedras, Departamento Pedagógico de Contabilidad, Facultad de Ciencias Económicas, UBA, Noviembre de 2012.

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Implementación de un Tablero de Comando y Balanced Scorecard en Empresas Tamberas en Argentina (1)

Por Milagros Montell y Joaquín Barsanti

Resumen

El presente trabajo seguirá la siguiente lógica:

  • El Planeamiento Estratégico y el Control Directivo
  • Introducción al Balanced Scorecard.
  • Síntesis del funcionamiento de un establecimiento tambero.
  • Identificación de los indicadores clave y de las relaciones causa-efecto.
  • Consideraciones para la implementación.

Del proceso de Planeamiento surgirá una misión, un objetivo a largo plazo, pero a la vez susceptible de ser volcado en la estrategia. El Control Directivo será el encargado de monitorear la implementación de las estrategias a nivel global, y el Balanced Scorecard constituye la herramienta de control directivo por excelencia.

Más adelante en el trabajo presentaremos algunos indicadores clave para el rubro. Por último, mostraremos algunos formularios que facilitan tanto la implementación como el posterior seguimiento de la veracidad de la alimentación de datos que dan origen al Balanced Scorecard y otras herramientas. 

1. El Planeamiento Estratégico y el Control Directivo

El Planeamiento Estratégico puede abordarse desde diferentes filosofías o formas de ver la realidad. Algunas personas ven en un hecho puntual una amenaza, y en cambio otras ven una oportunidad. Algunas personas ven en el pasado indicios de lo que puede venir, en cambio otras, imaginan el futuro y se lanzan a él. Pero pese a todas las diferencias, todos pueden hacer Planeamiento Estratégico.

El Planeamiento Estratégico Creativo, es decir, aquel Planeamiento en que sus constructores imaginan el futuro a su gusto y buscan un plan para hacerlo realidad, tiene un proceso bien estructurado, que se ofrece como herramienta útil y factible de ser implementada en cualquier organización. Involucra una serie de elementos que no serán analizados en este trabajo pero que son mencionados para que el lector pueda buscarlos si quisiera.

1.1. Las filosofías detrás del Planeamiento Estratégico

El proceso de Planeamiento Creativo facilita el poner en duda lo establecido, lo instituido, a veces arraigado como un modo de operar, pero otras veces, logrando un cambio mucho más profundo, logrando instituir nuevas formas de evaluar el contexto y encarar el cambio. Si ése fuera el caso, entonces el proceso de Planeamiento obligará a revisar la estrategia, el camino que trajo a esa organización hasta hoy, de modo de poder, si fuera necesario, enderezar el camino a recorrer en el futuro para orientar a la organización hacia su objetivo de orden superior: la Visión.

El Planeamiento Estratégico Creativo buscará imaginar el futuro deseado, para luego encontrar la forma más adecuada de construirlo, y las herramientas más confiables para controlar que así suceda paulatinamente. Y eso es manejar el cambio constante, el eterno presente.

1.2. El Proceso de Planeamiento Estratégico

El siguiente gráfico 1.1 muestra las etapas del proceso de Planeamiento Estratégico e incluye al control, dentro del cual podemos diferenciar el control de gestión y el control directivo.

procesoplanch

1.2.1. La Etapa Creativa del Proceso de Planeamiento

El Proceso de Planeamiento se inicia con una serie de cuestiones agrupadas bajo el nombre de “Etapa Creativa”. Esos aspectos son los siguientes: Análisis Situacional (para lo cual es comúnmente utilizada la herramienta FODA, aunque existen otras que complementan el análisis), Definición del Negocio y Definición del Éxito, Objetivos y Estrategias. Todos esos elementos estratégicos conjugados permiten alcanzar la orientación del negocio. Sin embargo, el proceso de planeamiento no termina aquí.

1.2.2. La Etapa Técnica del Proceso de Planeamiento

Puede verse en el esquema que a la Etapa Creativa le sigue una Etapa Técnica. El Presupuesto Integral será entonces lo que permitirá analizar la viabilidad de esos planes estratégicos en relación a los recursos con que cuenta la organización. ¡Pero atención! La viabilidad de la orientación estratégica del negocio ya fue analizada en la Etapa Creativa. Esto quiere decir que el rumbo a tomar por la organización, es viable desde las oportunidades existentes en el entorno, como así también desde las fortalezas propias de la organización. En la Etapa Técnica es momento de analizar la viabilidad económica y financiera de ese Planeamiento Creativo.

¿Y si se descubriera que los recursos son escasos para alcanzar los planes estratégicos? Pocas veces ocurre lo contrario, de modo que no habría que desesperar. Como en cualquier economía, incluso en nuestros hogares, existen dos opciones: o se acotan los planes a los recursos existentes, o se consiguen los recursos adicionales para financiar lo planeado originalmente. Será en esta ocasión entonces que resultará indispensable la evaluación de la financiación.

1.3. Relación entre la Etapa Creativa y la Etapa Técnica

Muchas veces ocurre que el Presupuesto es simplemente un proceso administrativo. No todas las organizaciones tienen procesos de Planeamiento tan estructurados, pero aún en estos casos, el Presupuesto logra alinear a la organización detrás de una estrategia, asignar responsabilidades, y de algún modo, aunque no sea consciente para el nivel directivo, logra también direccionar las decisiones más trascendentes detrás de objetivos más globales (aunque ese objetivo no haya sido replanteado nunca, se decide por omisión seguir caminando en el futuro, el mismo camino que condujo a esa organización hasta el presente).

El Planeamiento Creativo aporta una nueva Visión y Misión de la organización, la primera muy estable en el largo plazo. Desde allí se desprenden objetivos de orden menor, hasta llegar a los objetivos más cercanos, que permiten conformar los planes de acción para el año venidero. Existen también planes con un menor horizonte temporal, pues a medida que el nivel estratégico del planeamiento se hace más concreto y operativo, sirve de guía para el control diario.

Sin importar la filosofía del Planeamiento que soporte los cálculos volcados en los Presupuestos, éstos conforman en sí mismo un límite al gasto para cada uno de los sectores de una organización. El Presupuesto, al estar definido para un tiempo determinado, funciona también como un objetivo a cumplir, que incluye en sí mismo una serie de objetivos por sector, alineando de esta forma a la organización detrás de una estrategia.

Es muy importante considerar al Presupuesto Integral como un objetivo de orden superior (como la mismísima Misión si pudiéramos hacer presupuestos para dentro de 10 años), y a los planes que lo integran, como objetivos que hacen posible la estrategia organizacional. Cualquier objetivo, aunque sea de orden menor y no se refiera a cuestiones estratégicas, debe contener algunos requisitos mínimos para que pueda ser considerado objetivo.

En primer lugar, las variables en cuestión deben poder ser medibles, aunque no sea numéricamente, pero sí a través de algún patrón cualitativo (por ejemplo “Excelente – Muy Bueno – Bueno – Regular – Malo”). En segundo lugar, el objetivo a alcanzar debe tener un valor mínimo o umbral, a partir del cual se dice que el objetivo es o no alcanzado. Además, ese umbral debe estar enmarcado en un horizonte temporal. No es lo mismo alcanzar el umbral el mes próximo que dentro de cinco años. Es posible entonces reconocer estas características en el Presupuesto Integral. Es numérico, sus propios valores indican el umbral que debe alcanzarse para que el objetivo sea alcanzado. Finalmente, en general un Presupuesto Integral se refiere a un año de gestión, coincidente con el ejercicio económico de la organización en cuestión.

(“) Trabajo presentado en las XIV Jornadas de reflexión e investigación de temas contables en las cátedras, Departamento Pedagógico de Contabilidad, Facultad de Ciencias Económicas, UBA, Noviembre de 2012.

Continuaremos con el tema en próximos post…

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El poder de los miniobjetivos

Por Berto Pena

MINIOBJ

Al hablar de objetivos muchos tienden a pensar en grandes cosas que tal vez implican grandes cambios y esfuerzos. Pero los objetivos también pueden ser cosas más pequeñas, menos llamativas, más asequibles pero igualmente importantes en términos de resultados.

Fijarse objetivos encierra más complejidad de lo que parece a primera vista:

  • O bien fijamos objetivos inalcanzables.
  • O bien fijamos objetivos realizables pero no de la forma que queremos.
  • O bien fijamos objetivos a conseguir en plazos demasiado cortos.
  • O bien fijamos objetivos etéreos, ambiguos o poco concretos.
  • O bien fijamos objetivos que definimos mal o que no tenemos claro.
  • O bien fijamos objetivos que al final no se traducen en el día a día.

Con el tiempo he descubierto la utilidad de sustituir los objetivos, los más o menos grandes objetivos, los más o menos ambiciosos objetivos, los más o menos inspiradores objetivos, los más o menos deslumbrantes objetivos, por algo más pequeño-asequible-manejable-concreto: son los miniobjetivos.

El primer gran beneficio de los miniobjetivos es que te lo ponen todo más fácil. Descomponen el gran objetivo en pequeños pasos y te permiten caminar con menos dificultad. Trabajar y vivir con miniobjetivos es caminar hacia grandes objetivos con pasos más cortos. No importa el tamaño de tus pasos, importa que los des. Hacia delante.

El segundo es que te permiten avanzar hacia mayores empresas con cosas que ves y haces todos los días. Son pequeños y cotidianos, los haces y los repites, y tienes sensación real de progreso.

«Nada es particularmente difícil si se divide en pequeñas cosas» — Henry Ford.

Yo puedo proponerme escribir un libro dentro de un año o mejorar la forma en la que me expreso; o bien puedo proponerme escribir 15 minutos… cada día.

Yo puedo proponerme mejorar mi capacidad de concentración o no caer en distracciones digitales; o bien puedo proponerme cerrar el email e ignorar el móvil… al empezar el día.

Yo puedo proponerme mejorar mis habilidades técnicas o dominar una aplicación concreta; o bien puedo proponerme aprender un nuevo truco o técnica… cada día.

Yo puedo proponerme mejorar mi forma física o perder x kilos; o bien puedo proponerme salir a caminar o hacer ejercicio 30 minutos… cada día.

Yo puedo proponerme mejorar mi currículum o aprender un nuevo idioma; o puedo proponerme aprender tres palabras en inglés y una nueva expresión… cada día.

Cuando uno quiere pasar «de la teoría a la práctica», como muchas veces decimos, empezar de una vez sin caer en el clásico «a ver si encuentro un rato», la mejor estrategia es fijándose un miniobjetivo, para hoy mismo, para ahora. Y repetirlo hasta la saciedad.

Publicación original en ThinkWasabi (post original aquí)

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Herramientas para operativizar la estrategia en estructuras organizadas en unidades de negocio (3)

Por Milagros Montell y Joaquín Barsanti

Continuamos el desarrollo del trabajo después de la introducción que se desarrollara aquí, y el tratamiento del Proceso de Planeamiento, en este otro post.

1.2  El ciclo de Presupuestación

Los Objetivos anuales a nivel organizacional confluirán en lo que llamamos “Presupuesto Integral”. Veamos en el siguiente esquema cómo el Presupuesto Integral recoge los diferentes planes de todas y cada una de las áreas de la organización, siempre de acuerdo al Planeamiento Estratégico realizado en la Etapa Creativa.

Independientemente del organigrama, de su conformación por unidades de negocio o funcional, el encargado de armar el presupuesto integral construirá la información de acuerdo al análisis que esté desarrollando. Sin embargo, en relación al proceso de Planeamiento Estratégico, lo más lógico resulta construir la información de acuerdo a las diferentes unidades de negocio primero, para luego confluir en unas ventas totales y gastos de estructura a compartir por todas las unidades de negocio. Es decir, que el Presupuesto Integral tomará la forma de este Planeamiento Estratégico en su fase creativa, más allá de que el organigrama no se organice en unidades de negocio.

Veamos el gráfico[1]:

ciclopres


Como puede verse, el disparador de todos los planes es el Plan de Ventas. Íntimamente relacionado con éste se encuentra el Plan de Inversiones, y éste a su vez está estrechamente vinculado con el aumento del Activo Inmovilizado. La viabilidad del Plan de Inversiones hará posible el Plan de Ventas, y viceversa. Por eso, en el esquema las flechas que conectan el Plan de Ventas y el Plan de Inversiones son de ida y vuelta. Existe una retroalimentación entre ambos planes. Se necesita cierta estructura que soporte lo que propone el Plan de Marketing, y se necesita un Flujo de Fondos acorde que justifique la inversión en Activo Inmovilizado. Y directamente relacionado con estos Flujos de Fondos Proyectados, estará entonces el origen de la financiación. ¿La organización se financiará con capital propio o se apalancará con financiación extrínseca? Y aquí comienza un análisis que no es objeto del presente trabajo, pero que vale la pena mencionar rápidamente. Cuando la organización debe tomar decisiones acerca del origen de su financiación, la contabilidad en su modalidad “contabilidad legal” no permite la imputación de dividendos a los socios como resultado negativo. Sin embargo, desde la visión financiera de la empresa es necesario determinar con precisión los costos de las diferentes fuentes del dinero: intrínseca o extrínseca. Nos valdremos una vez más de la información de gestión para obtener en primer lugar, un costo de la financiación extrínseca lo más real posible, es decir, después de impuesto a la ganancias. A esto lo llamamos “costo financiero después de escudo fiscal”. Y luego, estaremos en condiciones de comparar en términos relativos, los “costos” de los diferentes tipos de financiación.

El ciclo de presupuestación contempla también planes específicos relacionados con Recursos Humanos. Y este tema, aunque no podamos por su amplitud abarcarlo completamente en estas líneas, nos interesará especialmente en el presente trabajo hacer una mención específica en un apartado especial más abajo.

El plan de Recursos Humanos Intenta anticiparse a los requerimientos futuros, de modo de poder capacitar a las personas que hoy colaboran con la organización, y de este modo desarrollarlas, o bien si esto no fuera posible, buscar esos perfiles en el mercado. La dotación necesaria por área será el elemento clave para poder conformar ese Presupuesto por Área. En el punto 6 de este trabajo profundizaremos sobre este tema.

Sigamos adelante con el Ciclo de Presupuestación.

El nuevo Plan de Ventas condiciona también el nivel de producción y todos los costos asociados directa e indirectamente con una unidad de producto adicional. Es importante mencionar que acá no se considerarán las inversiones adicionales en estructura, pues estará incluido en el Presupuesto de Inversiones. De esta forma, la Matriz de Insumo / Producto nos facilitará las especificidades en cuanto a cantidades de materiales, materias primas e insumos en general, que serán necesarios para satisfacer el nivel de demanda originado en el Plan de Ventas, así como también podremos prever un Plan de Mantenimiento Preventivo de las instalaciones, de modo de controlar razonablemente la aparición de sorpresas desagradables.

Así, fuimos repasando el camino habitual para lograr el llamado “Presupuesto Integral”.

Por último, el proceso de Planeamiento Estratégico termina, o vuelve a empezar si se quiere, siempre aprendiendo de los errores o desvíos. Éste es el Control de Gestión, que involucra una cantidad de herramientas muy flexibles, adaptables a las necesidades del negocio, útiles todas para el seguimiento de la Estrategia. Podríamos nombrar entre otras: Análisis Progresivo de Variaciones, Tablero de Comando, Balance Scorecard, Evaluación de Desempeño.

Como anticipábamos unos párrafos más arriba, dentro del Proceso de Planeamiento que sucintamente hemos repasado, cada empresa podrá organizar su estructura por funciones o por unidades de negocio. Sin embargo, no siempre coincide el organigrama con la forma de esquematizar el Planeamiento Estratégico ni el Presupuesto como parte integrante de ese Planeamiento. Es decir, que aquel Proceso de Presupuestación, incluido en el Proceso de Planeamiento y Control, recogerá información de áreas funcionales o de unidades de negocio, de acuerdo a cómo se encuentre estructurada la organización. Pero el organigrama podría ser exactamente al revés de cómo se estructure la realidad de la información. Muchas veces, ocurre que las empresas tienen áreas funcionales, y su organigrama formal da cuenta de ello. Los responsables funcionales están definidos. Sin embargo, por sobre ese organigrama convive a veces una realidad organizada de acuerdo a unidades de negocio, con coordinadores que no tienen gente a cargo en otros departamentos.

El presente trabajo intenta avanzar sobre el análisis de las organizaciones estructuradas por Unidades de Negocios. En estos casos, el Presupuesto Integral se valdrá de la información que cada Unidad de Negocio aporte, así como también de la información aportada por todas aquellas funciones centrales de apoyo a las Unidades de Negocio: ejemplos clásicos son Administración y Recursos Humanos.

[1] Diez, Gerardo. La problemática del Control en las Organizaciones.

Continuaremos con el tema en próximos post…

De la misma serie:

Herramientas para operativizar la estrategia en estructuras organizadas en unidades de negocio (1)

Herramientas para operativizar la estrategia en estructuras organizadas en unidades de negocio (2)

Para ampliar el tema:

Ramos Mejía, Mariano. ¿Qué es el Presupuesto?

Diez, Gerardo. El Proceso de Presupuestación Anual.

Ramos Mejía, Mariano. El Presupuesto Integral. (serie de seis post)

 

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