El concepto de riesgo-rentabilidad en la toma de decisiones de inversión

Binomio riesgo-rentabilidad

No existe inversión sin riesgo, aunque algunos productos tienen más riesgo que otros.

Como veremos a lo largo de este bloque, una de las características más importantes para diferenciar una alternativa de inversión de otra, es el nivel de riesgo que supone. Antes de seguir, es importante conocer el concepto básico del binomio riesgo-rentabilidad.

La capacidad de generar rendimientos se conoce como rentabilidad.

En una inversión, los rendimientos futuros no son seguros. Pueden ser grandes o modestos, pueden no producirse, e incluso puede significar perder el capital invertido. Esta incertidumbre se conoce como riesgo.

No existe inversión sin riesgo. Pero algunos productos implican más riesgo que otros.

La única razón para elegir una inversión con riesgo ante una alternativa de ahorro sin riesgo es la posibilidad de obtener de ella una rentabilidad mayor.

  • A iguales condiciones de riesgo, hay que optar por la inversión con mayor rentabilidad.
  • A iguales condiciones de rentabilidad, hay que optar por la inversión con menos riesgo.

Cuanto mayor el riesgo de una inversión, mayor tendrá que ser su rentabilidad potencial para que sea atractiva a los inversores. Cada inversor tiene que decidir el nivel de riesgo que está dispuesto a asumir en busca de rentabilidades mayores. Esto lo veremos un poco más adelante.

Gráfica riesgo-rentabilidad de distintas estrategias de inversión. Cuanto mayor la rentabilidad potencial, mayores son las pérdidas posibles. De menor a mayor riesgo-rentabilidad: conservadora, moderada, agresiva y muy agresiva.

Como vemos en esta gráfica, las estrategias de inversión se suelen clasificar como “conservadoras”, “agresivas”, “moderadas”, etc., términos que se refieren al nivel de riesgo asumido, y por lo tanto la rentabilidad potencial buscada.

Cuanto más riesgo se asume, más rentabilidad se debe exigir. Igualmente, cuanta más rentabilidad se pretende obtener, más riesgo hay que asumir.

¡Cuidado! Riesgo y rentabilidad van unidos, pero aceptar un mayor riesgo no es ninguna garantía de obtener mayores rendimientos.

“Una inversión de mayor riesgo, produce mayor rentabilidad –
¡excepto cuando no lo hace!”

Publicado en Finanzas para todos. Post original aquí.

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El cuadro de Mando Financiero

Siguiendo con la línea de artículos relacionados con los cuadros de mando operativos, voy a abordar uno de los aspectos clave en la salud de cualquier organización, el área financiera y contable.

Sea cual sea el sector de tu empresa, el objetivo principal es ganar dinero, por lo que es fundamental mantener el enfoque en los resultados económicos y en las necesidades financieras.

El Cuadro de Mando Financiero es una herramienta precisa que permite ahorrar mucho tiempo y dinero, ya que ayuda a vigilar de cerca los aspectos clave del negocio. Dentro del cuadro de mando financiero podemos distinguir diferentes áreas, con enfoques distintos y frecuencias de actualización variables:

  • Cuenta de Resultados
  • Balance
  • Ratios Financieros
  • Gestión de Tesorería
  • Cobros y Pagos
  • Ficha Financiera de Cliente
  • Ficha Financiera de Proveedor

Cuadro de mando financiero

Los responsables financieros de las organizaciones tienen necesidad de disponer de la información relevante en el momento preciso, para llevar a cabo una toma de decisiones adecuada a la situación actual.

Hay empresas que cierran la contabilidad del año anterior en marzo de este año. Es un poco tarde para tomar decisiones, ¿no te parece?

Como mínimo, una organización debe disponer de un sistema de información que le permita reaccionar a tiempo cuando las cosas van mal o mantener su línea de actuación si las cosas están funcionando. No sirve de nada darse cuenta de que vamos mal cuando han pasado meses. Ya no hay tiempo para reaccionar.

Ratios financieros

Las herramientas habituales de control financiero pueden requerir de un esfuerzo para recopilar los datos necesarios para el análisis y confeccionar los informes necesarios. Este esfuerzo para llegar a disponer de los informes puede provocar que se vaya dejando para cuando tengamos tiempo suficiente, hasta que ya es tarde.

Un Cuadro de Mando Financiero permite automatizar el proceso de recopilar y analizar la información necesaria y disponer de herramientas adicionales parta el control del día a día del área financiera y contable.

Podemos disponer de una herramienta de planificación de tesorería que nos informa en tiempo real de los próximosvencimientos para llevar a cabo una estrategia de inversión del excedente de tesorería.

Una sección de los ratios financieros más importantes nos ayuda a no perder de vista las claves de nuestro negocio.

El Cuadro de Mando Financiero permite recopilar información de distintas fuentes para completar un escenario en lugar de limitarse a extraer datos del ERP. Podemos conectarlo, además, con el programa de contabilidad, con una tabla de extractos bancarios, saldos de cuentas, inversiones, pagos auxiliares, unidades de negocio externas y un largo etc.

Ratios Financieros

Una de las ventajas de utilizar una herramienta de Business Intelligence para disponer de un Cuadro de Mando Financiero es que los datos llegan a él directamente desde su origen, sin posibilidad de alteración. En la mayoría de las organizaciones los resultados de los análisis pasan por hojas de cálculo intermedias dónde se modifican y adaptan, no pudiendo garantizar la integridad de los mismos.

Si queremos detectar cambios sustanciales en el equilibrio de nuestro negocio tenemos que configurar los indicadores que nos informen de los cambios que marcan tendencias y que nos permitan reaccionar a tiempo.

También podemos incluir una herramienta de simulación de escenarios que posibilita valorar distintas opciones antes de tomar una decisión.

Lo importante es que los datos financieros necesarios para la toma de decisiones estén disponibles en poco tiempo para que los responsables financieros puedan asesorar de forma adecuada a los responsables de negocio.

Publicado originalmente en CMI Gestión. Post original aquí.

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Planeando tu futuro aplicando finanzas personales – 1 de 4

por Leyla Bonilla (blpgirl)

financiera

Planear tu futuro financiero es una de las cosas más importante que puedes hacer porque puede asegurarte tu futuro y el de tus seres queridos. Realmente se quiere gestionar el dinero de tal forma que cuentes con este ahora y en el futuro.

En la planeación financiera, hay muchos aspectos a tener en cuenta para asegurar que tus finanzas sean balanceadas mientras vas consiguiendo tus metas a corto y largo plazo. El primer paso es hacerte una idea clara y precisa de donde te encuentras ahora mismo con tus finanzas, luego puedes proceder al siguiente nivel, decidir a donde quieres estar, y como llegar hasta allá.

“Lo que no se puede medir no se puede gestionar.”
– Peter Drucker

Para poder hacer un diagnóstico de nuestra situación actual hay 2 herramientas prácticas:

  1. Flujo de Caja: se trata de llevar un record de todos tus ingresos y gastos que tienes mensualmente. El resumen de tu flujo de caja debe listar todas las fuentes de ingresos que estén disponibles para gastar, si tienes un cheque o una inversión que no puedes convertir en efectivo no hacen parte de tus ingresos por ahora.Esta herramienta te dará una idea de como vas financieramente en tu día a día. Para el cálculo, la fórmula es muy simple:

    Flujo de caja = Ingresos – Egresos

    Te recomiendo esta plantilla para calcular flujos de caja.

  2. Valor neto: este es casi que una foto de tu vida financiera en un momento determinado, es un número que representa tu salud financiera. Es el acumulado de todo lo que haz ganado y gastado hasta el momento. Por lo anterior, este es el mejor indicador del nivel de riqueza que posees.La definición de esta herramienta es bastante sencilla:

    Valor neto = total de activos (lo que tienes sea tu casa, tu carro, joyas valiosas, etc) – total de pasivos (lo que debes sean préstamos, el balance de tu tarjeta de crédito, etc).

    Te recomiendo esta plantilla para calcular tu valor neto.

Una vez haz hecho el ejercicio de calcular tu flujo de caja y tu valor neto, revisa los resultados obtenidos con detenimiento. El primer signo de alarma es si tu flujo de caja es negativo porque estas gastando más de lo que ganas lo que a mediano plazo, si aún no ha pasado, te llevará a hundirte en deuda.

Si estás gastando todo lo que ganas o más, examina bien si todos tus gastos son realmente necesarios y empieza a cortar o reducir los que no lo sean. Por otro lado, piensa en que gastos puedes reducir ya sea cambiándote a un plan más barato o comprando productos alternativos más baratos. Si con todo lo anterior, aún te encuentras en apuros, tendrás que buscar formas de conseguir más ingresos ya sea buscando un mejor trabajo o buscando alternativas de ingresos como vender almuerzos a tus vecinos los fines de semana, trabaja de niñero o cuidador de mascotas, ofrece pagar servicios o hacerle oficios a tus vecinos, etc.

Si, por el contrario, tu flujo de caja es positivo, entonces tienes un dinero extra mensual que puedes usar para empezar a alcanzar tus metas financieras (crear un fondo de emergencia, salir de todas tus deudas, etc.) y de esto hablaré en un próximo artículo. Sin embargo, algunas cifras rápidas para tener en cuenta es que el porcentaje de tus ingresos que dediques a gastos fijos (salud, entretenimiento, colegiatura, etc.) no supere el 30% de los mismos y para pagos de deudas, igualmente, no debería superar el 30%.

En cuanto al valor neto, si este es negativo quiere decir que debes más de lo que tienes y por tanto te encuentras endeudado en el momento. Este, sin embargo, no necesariamente tienen que ser malas noticias si acabas de coger un préstamo para comprarte un carro nuevo mientras seas consciente del plan de pagos que tienes por delante y cómo harás para salir de la deuda en unos meses o pocos años.

Tu valor neto cambia con el tiempo de acuerdo a tus ingresos y hábitos de gasto y ahorro. Lo ideal es que tu valor neto aumente con el tiempo al construir tus activos y pagar tus deudas. Evaluando tu valor neto con el tiempo, puedes mirar si vas en el camino correcto o si te toca hacer cambios para alcanzar tus metas financieras.

Cabe anotar y recalcar que la importancia de estas herramientas está en la planeación de nuestro futuro por si en algún momento nos vemos imposibilitados para seguir trabajando o se agranda la familia con la llegada de un hijo o queremos retirarnos jóvenes, entre otros motivos. Sin embargo, no se trata de dejar de disfrutar de nuestros activos e ingresos en el presente ni implica que tener mayor riqueza neta sea una garantía de felicidad.

Publicación original en Todo lo que le diga es mentira (Post original aquí)

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Diagnóstico Financiero: El análisis del primer vistazo (III)

Por Gerardo Diez

Una aproximación rápida a la realidad de la empresa  a través de su información económico – financiera.


Endeudamiento y valor de mercado: un alto en la huella

Antes de seguir adelante es necesario agregar dos conceptos a nuestro análisis: ¿Cómo impacta la forma en que se financian los activos en nuestro negocio? y ¿cuál es el valor de mercado de la empresa más allá del valor contable de la misma?

Pasar a considerar cómo son financiados nuestros activos y cuál es el costo de dicha financiación implica cambiar nuestra mirada hacia el  lado derecho de la ecuación contable, sobre los orígenes de los fondos y el costo que los mismos tienen para la empresa:

  • Podemos distinguir 2 tipos de orígenes de fondos (o fondeo del negocio), la distinción obedece a dos tipos de contratos u obligaciones diferentes que la organización va a contraer con los proveedores de dinero: a) Deuda financiera, con costo explícito, flujo de fondos cierto, con el riesgo del inversor acotado al monto y período por el cual se otorga el préstamo y factibilidad para el deudor de descontar ese costo de la base imponible de las ganancias de la empresa; o b) Patrimonio Neto,  participación accionaria, participación en el riesgo del negocio ilimitada tanto en resultados positivos como negativos como en el período de tiempo que dure el proyecto. En contraposición de la deuda financiera, la rentabilidad para el inversor en acciones es implícita e incierta.
  • El negocio está por definición fondeado con el patrimonio neto, esto es aportes de los accionistas más o menos los resultados acumulados positivos o negativos desde el comienzo de la actividad. La posibilidad de agregar una porción de deuda financiera que reemplaza en el mix de financiación al capital propio genera un cambio de riesgo junto a la posibilidad de acceder a un menor costo de los fondos. El diferente costo (y consecuente riesgo) emana de la distinta naturaleza de aquellos contratos y genera lo que se conoce como trade off de la deuda: balance de ventajas y desventajas que dependen de la situación de cada empresa, su nivel de riesgo operativo, el nivel de aversión al riesgo de quienes la gerencian, la etapa del ciclo de vida en la que se encuentre el negocio, etc. No cumplir los compromisos de una deuda contraída significa una posibilidad de bancarrota, default, quiebra o pérdida del control accionario, tarde o temprano. A mayor nivel de endeudamiento más probable el riesgo de default
  • El costo del capital propio (ke), a veces llamado costo de oportunidad, refleja el rendimiento mínimo que debe tener el proyecto para que el accionista se aventure en él. De forma simplificada lo podemos formular como el costo del dinero sin riesgo (retorno asegurado) más una sobretasa que será mayor para proyectos más riesgosos.
  • En la medida que los fondos provienen de ambas fuentes de financiación con un mix determinado, el promedio ponderado de ambos costos se conoce como WACC (*) o tasa mínima aceptable para la aprobación de proyectos que son puestos en evaluación a través de su capacidad de generar flujos de fondos (o Free Cash Flows (*))

Esta última cuestión es precisamente el puente al tema del valor de mercado de la empresa.

(*) Glosario:

Activos Netos: Activos del negocio netos de: deudas comerciales, impositivas y sociales, obligaciones con terceros que no tienen costo explícito y que derivan de la operatoria comercial con proveedores, personal y entes recaudadores de impuestos y cargas sociales

N.O.P.A.T.: Net Operating Profit After Taxes; resultado operativo después de impuestos

R.O.I.C.: Return on Invested Capital

Deuda: Deuda financiera con costo (interés) explícito

Free Cash Flow: Flujo de fondos del negocio sin considerar los movimientos financieros dela Deuda(intereses, toma o devolución del principal de préstamos) ni los movimientos financieros con accionistas (dividendos, recompra de acciones, aportes de capital o emisión de acciones)

EBITDA: Earns Before Interest Taxes Depreciations & Amortisations; resultados antes de intereses, impuesto a las ganancias y amortizaciones

EBIT : Earns Before Interest & Taxes; resultados antes de intereses e impuesto a las ganancias

EBT : Earns Before Taxes; resultados antes impuesto a las ganancias

Market Value: Valor de mercado de una empresa

WACC: Weighted Average Cost of Capital; costo promedio de los activos ponderado

Continuará…

De la misma serie:

Diagnóstico Financiero: El análisis  del primer vistazo (I. Una mirada rápida para reconocer lo sustancial).

Diagnóstico Financiero: El análisis  del primer vistazo (II. Los primeros seis indicacores clave: la eficiencia del uso de recursos).

Del mismo autor en este blog:

Reflexiones sobre Crisis y Planeamiento

Los sistemas de control directivo: un modelo situacional.

La problemática del Control en las Organizaciones.

El Proceso de Presupuestación Anual.

¿En que consiste el Planeamiento?

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6 lecciones financieras de un mafioso

Por Karla Bayly

Son malos, muy malos y es evidente el mal que le hacen a la sociedad. Sin embargo las mejores prácticas (best practices) para nuestras finanzas son algo que podemos aprender también de los mafiosos. He aquí seis lecciones que podemos aplicar:

    1. Los imperios no se heredan, se ganan a sangre y fuego. ¿Sabes de alguien que haya tomado posesión de su cartel/territorio después de la lectura de testamento ante un notario? La respuesta es no. Cada uno de nosotros es responsable de construir su propia riqueza. Los ascensos en el trabajo y/o éxitos empresariales que perduran se ganan en base a capacidades y perseverancia.
    2. Hasta para ser malo, es necesario tener un plan de carrera. Cualquiera que se integra a la organización comienza desde abajo, aprende el movimiento y va ascendiendo escalones solamente si hace bien su trabajo y demuestra ambición y lealtad. Saber a dónde vamos, en qué lugar estamos y lo que necesitamos hacer para lograrlo nos acercará, sin duda alguna, a nuestra meta financiera.
    3. No progresa aquel que no hace equipo. Tú me apoyas y yo te apoyo. De lo contrario desataremos una guerra sin cuartel que consumirá no solo nuestros recursos sino la posibilidad de crecer el negocio. Las finanzas sanas requieren hacer equipo con la familia y círculo cercano. De nada sirve un ahorrador con una familia que gasta todo lo que aquel ahorra.
    4. Quien se vuelve confiado y descuidado es atrapado. No es la maravillosa inteligencia policial, sino los excesos y descuidos los que llevan a estos personajes tras las rejas. No se puede confiar en exceso en la permanencia en un trabajo o la llegada de los clientes. Tampoco se puede descuidar el control de las finanzas una vez que se ha llegado a la meta.
    5. Hay que rodearse de los mejores. Su vida depende de quienes los rodean, así que los grandes capos no se rodean de personas por debajo del promedio. Construyen su círculo de confianza a partir de los mejores de su equipo y se hacen rodear de especialistas en tareas delicadas como lavado de dinero, distribución, etc. No podemos ser expertos en todos los aspectos de nuestras finanzas pero, si vamos a delegar, es necesario hacerlo en personas preparadas para ello.
    6. Nunca está de más diversificar las fuentes de negocio. No se conforman con un solo ramo sino que, a través de aprendizaje e inversiones, son capaces de desarrollar nuevos y rentables negocios. El ahorro no es el único pilar del éxito financiero, las inversiones y la educación aceleran el proceso para alcanzar la salud financiera que deseamos.

¿Conoces otras lecciones que podamos aplicar para nuestras finanzas personales?

Karla Bayly

Fuente: Karla Bayly – Finanzas Personales. Post original aquí.

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